miércoles, 16 de diciembre de 2015

Simplifica y da prioridad a tus piedras grandes




En breve empezará un nuevo año lleno de buenas intenciones y nuevos propósitos (o no tan nuevos): estudiar inglés, ser más organizado, vestir más el color verde, etc.

Yo creo que si quieres hacer algo, empezar algún proyecto, dejar un mal hábito, etc. el momento adecuado es ahora mismo, porque el que sea 1 de enero no cambia nada, es sólo una fecha más. También creo que lo mejor es hacer pequeños cambios y ser constante, uno no cambia de la noche a la mañana como por arte de magia.


Si eres de los que tienes la agenda llena de actividades, la sensación de que te falta tiempo al final del día y de que no sacas tiempo para hacer lo que realmente te gusta, quizás te interese la forma en la que yo me organizo. Aunque reconozco que no siempre sigo esta rutina, pero cuando la sigo todo me cunde más y me siento mejor.

Se basa en la fábula del tarro y las piedras, que consiste en dar prioridad a lo que realmente es importante para ti.  Aquí puedes ver de lo que hablo. Pero resumiendo, consiste en colocar en un tarro las piedras grandes primero, que serian tus prioridades, y el resto de piedras pequeñas y la arena (cosas menos prioritarias) en los huecos que dejan las piedras grandes. Porque si pones primero la arena o las piedras pequeñas no habrá espacio para las piedras grandes, es decir, lo que es realmente importante para ti.

De modo, que o bien el domingo por la noche o el lunes por la mañana, apuntas en una libreta, agenda o donde quieras, tus tres piedras grandes, es decir tus prioridades, lo que realmente sea importante para ti, lo que te ayude a realizar tus objetivos y tus sueños. Lo que te hace feliz.

Luego por cada día de la semana apuntas 3 o 4 cosas que quieras hacer o debas hacer. Depende del tiempo del que dispongas quitando las obligaciones tipo trabajo. 

No te ha pasado por ejemplo tirarte semanas pensando: tengo que ir al dentista que ya me toca la revisión, y pasan los días y las semanas y eso sigue en tu mente cada dos por tres…pues lo haces y te liberas :)

Se trata de simplificar tu vida eliminando lo que no es esencial y te quita tiempo y energía para hacer lo que realmente te gusta. Consiste en elegir de forma consciente en qué ocupas tú tiempo, con quién te relacionas, qué es importante para ti, en qué gastas tu dinero, y todas esas cosas que haces por inercia sin pararte a pensar si realmente disfrutas con ellas.


Por ejemplo, te has parado a pensar en la cantidad de objetos que las personas tienen en sus casas que realmente no les aportan nada y tienen que dedicar tiempo limpiándolos u ordenándolos  y eso les estresa y les quita tiempo. O en el tiempo que algunas personas dedican relacionándose con gente que les aburren soberanamente, y por compromiso siguen quedando... Esas cosas quitan energía y tiempo para lo que realmente sí hace sentir bien. ¿Te sientes identificado/a? Pues mi consejo es: SIMPLIFICA





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